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PALABRAS FINALES SOBRE LA PROFECÍA UNIVERSAL
Después
de investigar y meditar acerca de esta Profecía, quien escribe, siente la
certeza interior que el Planeta Tierra y su humanidad se dirigen
irremediablemente hacia el desenlace que esta Profecía señala.
Varios
puntos principales que toca esta Profecía ya están presentes en otras profecías;
pero puede observarse en esta un esclarecimiento en cuanto al posible orden de
los acontecimientos futuros y en cuanto a la comprensión de la naturaleza y
alcance del denominado “Juicio Final”.
El
tiempo exacto del Juicio, como dice una conocida cita bíblica “Solo el Padre lo conoce” (Mateo
24-36), así que conjeturar con fechas exactas, como
tanto se ha hecho (especialmente en el tramo final de los últimos 2 milenios),
es errar. Pero sin embargo, si tomamos en cuenta la cita bíblica (en Mateo
24-34): “Yo os aseguro que no pasará esta
generación hasta que todo esto suceda”, y la interpretamos correctamente,
tendremos una noción más clara de “los tiempos”.
Para
interpretar correctamente ese versículo hay que entender a la palabra
“generación” como sinónimo de “Raza humana”. La actual ‘generación racial’ es
la Aria (la 5° Raza) y ya han aparecido 5 subrazas de las 7 que conformarían el
desarrollo de la Raza completa. La 5° subraza de la Raza Aria es la Teutónica
(y anglosajona) pero ya están apareciendo, esparcidos por el Globo Terráqueo,
humanos de la 6° y de la 7° subrazas. Es decir que estamos transitando el tramo
final de la actual “generación racial”. Esto nos permite concluir que dentro de
este último tramo de evolución racial, en la actual Época Aria, “en el momento que no penséis” (Mateo
24-44), ocurrirán los Eventos relacionados a la
venida del ‘Hijo del hombre’ y su “Juicio” o gran “Reequilibrio Cósmico”, el
cual no afectará tan solo al Planeta Tierra, sino a todo el Universo Local.
En
la Tierra se ha centralizado el escenario de la lucha entre las dos grandes fuerzas
universales, ‘crísticas’ y ‘anticrísticas’. Esta oposición de fuerzas, con
propósitos y direcciones opuestos, ha formado parte, (como el estudioso sabe),
de la Evolución; pero causas de un orden evolutivo “macrocósmico” (una ‘Iniciación
Universal’) llevarán prontamente a un desenlace de REEQUILIBRIO CÓSMICO, que
muchos han denominado “Juicio Final” o “Juicio Universal”. Tal desenlace (al
tratarse de una Iniciación Mayor del Logos Universal) producirá una
reestructuración de fuerzas y un reequilibrio nunca antes acontecido en el
Universo. El “freno” a las fuerzas anticrísticas será total y definitivo,
porque el ‘Organismo Universal’ expulsará de su Sistema las energías que ya no
necesitará para seguir su evolución. Esto, como puede observarse, excede en
mucho a la Tierra y al Sistema Solar; inclusive tiene un alcance mucho mayor al
de la Vía Láctea, ya que abarcaría el conjunto de galaxias que conforman
nuestro Universo Local.
Si
bien el tiempo exacto de tal acontecimiento único nadie lo conoce con exactitud,
como vimos, sí sabemos que tal evento de orden universal coincidirá con el
Juicio Racial de la actual generación racial humana en la Tierra, lo cual nos
permite deducir, conociendo los tiempos aproximados de la Raza, que en cualquier
momento, podría suceder. Hay que observar “las señales”, los acontecimientos
mundiales, y “abrir los ojos”.
En
síntesis: “El día y la hora nadie la conoce, sino tan solo el Padre”. Pero
también tenemos la idea que “no pasará esta generación (racial) antes que esto
suceda”, y al final del Apocalipsis las palabras de cierre son:
“Dice el que da testimonio
de todo esto:
‘Sí vengo pronto’ ¡Amén!
¡Ven Señor Jesús!
Que la gracia del Señor Jesús sea con
todos.
¡Amén!”
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